LA GUARDIA CIVIL
Las diferentes
revoluciones y el consecuente caos social que se originó a lo largo del siglo
XIX dieron como resultado la necesidad de crear un nuevo cuerpo de orden
público que, a nivel central, fuese capaz de luchar de forma coordinada y en
todo el territorio nacional contra las nuevas formas de delincuencia. Dicha
fuerza sería la denominada Guardia Civil.
Con la intención de que el
nuevo cuerpo sirviera de ejemplo y modelo de conducta y de las virtudes
patrias, el 28 de marzo de 1844, bajo el reinado de Isabel II, se emitió un
decreto, que sería seguido por otro el 13 de mayo del mismo año, por el que se
creaba un cuerpo de naturaleza militar dependiente de los ministerios de
Gobernación y de Guerra, atajando así la inseguridad que el bandidaje
provocaba.
Esta nueva institución,
que recibiría en 1929 el título de "Benemérita", fue creada bajo el
gobierno de Narváez, a propuesta del Mariscal de Campo don Francisco Javier
Girón y Ezpeleta, Duque de Ahumada, quien auspició la creación de la llamada
"Cartilla de la Guardia Civil", en la que se referían las virtudes y
actitudes que el nuevo Cuerpo debía tener, logrando sus primeros éxitos
rápidamente y limpiando las vías de comunicación entre las ciudades (detuvo a
40.093 maleantes entre 1846 y 1847). En su Cartilla se incluía la esencia de la
conducta que debía ostentar la nueva entidad, formada por oficiales del
ejército, aunque buscadora de una identidad propia:
"La formación de un cuerpo respetable, y esencialmente
conservador, en el que hallase la sociedad la protección que le es debida. Para
llenar este objeto es indispensable que este cuerpo sea un modelo de todas las
virtudes políticas y militares. Forma un universo conscientemente propio, con
sus costumbres, su visión del mundo propia, su forma de vestir característica,
la disciplina y jerarquía, su culto al detalle, sus ritos y sus
símbolos..."
Los grandes progresos de
la Guardia Civil y su capacidad de sacrificio y abnegación la convirtieron en
modelo de admiración del pueblo español, logrando ser el Cuerpo de Orden
Público que mayor continuidad ha tenido en nuestra historia policial.
COCHES DE LA GUARDIA CIVIL
Land Rover de la Guardia
Civil, 1956
Citroën 2 CV de la Guardia
Civil, 1959
Seat 1400 C de la Guardia
Civil, 1962
Renault 4 F, Ambulancia,
Guardia Civil, 1966
Renault 10 de la
Agrupación de Tráfico, 1967
Dodge Dart de la
Agrupación de Tráfico, 1968
Citroën Dyane de la
Guardia Civil, 1973
Volkswagen Escarabajo,
Agrupación de Tráfico, 1973
Seat 124 D de la
Agrupación de Tráfico, 1977
Chrysler 150, Guardia
Civil, 1978
Land Rover Santana 109 de
la Agrupación de Tráfico, 1978
Seat 131 Supermirafiori de
la Agrupación de Tráfico, 1979
Peugeot 505 de la
Agrupación de Tráfico, 1982
Citroën Visa de la Guardia
Civil, 1982
Seat Ritmo 75 CL de la
Agrupación de Tráfico, 1984
Seat Ronda de la
Agrupación de Tráfico, 1984
Mercedes N1300 de la
Guardia Civil, 1985
Renault 4TL de la Guarida
Civil, 1985
Mercedes N1300 de la
Guardia Civil 1987
Citroën BX 19 de la
Guardia Civil, 1988
Mercedes MB 140 ,
Transporte de Detenidos, Guardia Civil, 1990
Peugeot 309 de la
Agrupación de Tráfico, 1991
Citroën C 25 del Grupo
Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, 1991
Nissan Patrol de la
Guardia Civil, 1992
Nissan X-Trail de la
Guardia Civil, 2004
Nissan Patrol GR de los
Grupos de Acción Rural, Guardia Civil, 2005
Nissan Primera de la
Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, 2007
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